domingo, 5 de noviembre de 2017

¿Vivir el "Aquí y el Ahora" Nos causa ansiedad?

Cuando éramos niños/as imaginábamos el futuro. Nos veíamos a nosotros mismos siendo lo que deseábamos ser. Pero no dejábamos de ser niños/as. 

No dejábamos de disfrutar pensar sobre nuestro futuro, y al mismo tiempo no dejábamos de hacer lo que hacíamos, no dejábamos de jugar  o disfrutar nuestros momentos de infancia.

Incluso, ni siquiera nos concentrábamos en pensar si disfrutábamos o no nuestro día a día.

En ocasiones nos apuraba ser adultos, deseábamos crecer pronto para poder resolver aquellos conflictos que nos hacían sentir impotentes por no ser adultos. El futuro parecía ofrecernos una solución a nuestro, entonces, presente. Y entonces pensábamos en nuestro futuro.

Así que, ¿Por qué entendemos que el "Aquí y ahora" se trata exclusivamente sobre actuar y pensar en el presente?, ¿Por qué creemos que pensar en el futuro no es adecuado?, ¿Por qué pensamos que el "Aquí y ahora" se trata sólo de disfrutar y ser feliz?... ¿Por qué terminamos encasillados en el presente?

Si bien, vivir en el pasado y en el futuro no resulta sano, en ocasiones es necesario.
Sabemos que los extremos no son sanos ni útiles. Pero tampoco deben ser negados. 
Nuestro pasado, nuestra historia y nuestros antecesores definen, en parte, nuestro ser.


"Quien no conoce la historia, tiende a repetirla".- frase atribuida a diferentes personajes de eventos históricos.
Conocer sobre nuestro pasado es conocernos a nosotros mismos, pero encarcelarnos en él nos detiene en nuestro camino.

Por otra parte, en la actualidad, pensar en el futuro también ha sido cuestionado:

"No pienses en el mañana...vive el Hoy"
Asumimos que si pensamos en el Mañana dejaremos de disfrutar nuestro presente, creemos que el presente se nos irá de las manos y si no lo disfrutamos entonces será un momento perdido y no valorado. Si no lo aprovechamos, si no lo valoramos entonces afirmamos que no sabemos vivir o disfrutar de la vida.


Hacemos conclusiones y afirmaciones sobre el "Cómo vivir" que más tarde nos generarán estrés o ansiedad. Nos sentiremos obligados a actuar bajo estos supuestos.

De pronto olvidamos cómo asumíamos nuestra vida cuando éramos niños/as. Cuando integrábamos nuestra conciencia del pasado, presente y futuro sin afirmaciones o "Ley de vida".

El "Aquí y Ahora" se ha propagado sin ser reflexionado. Integramos a nuestra conciencia frases, afirmaciones, pensamientos y reflexiones de vida sin ser procesados. ¿Qué pasa cuando integramos algo sin reflexionarlo?

Hablar del "Aquí y Ahora" no significa excluir tu pasado y tu futuro. No significa que no hagas planes. No significa aferrarte a tu presente. Disfrutar del "Aquí y Ahora" no significa tener miedo de no ser capaz de "Disfrutar al máximo"

Finalmente, ¿cómo sabemos que lo disfrutamos al máximo?...Si, aquí viene la ansiedad.

Últimamente nuestro mundo parece tener nuevas reglas sociales:

"Si no está en redes sociales no existe"
"Si no hay foto no pasó"
"Si no hay -likes- no fue importante"
"Si no escribes lo que sientes entonces no lo sientes"
"Si no sonríes no lo estás disfrutando"
"Si no eres feliz entonces no estás valorando tu vida"

Bajo estos supuestos (y existen muchos más), podemos ver que, si no tienes una foto disfrutando del momento entonces no lo disfrutaste al máximo. Concluimos que nuestra vida debe ser pública para demostrar que sí vivimos, que sí disfrutamos, que sí somos felices, que sí valoramos la vida y que vivimos el "Aquí y el Ahora".

Y entonces andamos por la vida buscando "Lo mejor de lo mejor", buscamos el mejor fondo para nuestra foto, ensayamos frente al espejo nuestro mejor perfil para esa futura foto (¿No que sólo pensamos en el "Aquí y Ahora"?), incluso planeamos cómo gastar nuestro dinero porque "Hay que vivir ahora, no sabemos si mañana moriremos".

Bueno, tampoco sabemos si mañana seguiros vivos... y de ser así, veo necesario pensar en nuestro futuro.

Nuestro mundo se ha convertido en Videos en vivo, en documentar lo que hacemos, en publicaciones instantáneas. Nuestro mundo es justamente eso: instantáneo. Ya no sabemos esperar, no sabemos llevar procesos, no sólo queremos llegar rápido sino que queremos llegar primero. 

Un ejemplo, los jóvenes de ahora pueden llegar a los altos puestos directivos.

¡Vaya! Antes las personas que ocupaban puestos directivos eran personas mayores y con bastante experiencia. Hoy conozco jóvenes, no mayores de 30 años con puestos directivos o cerca de obtenerlo. (Y no desacredito su valor profesional)

Nuestra vida va demasiado rápido. ¡Vemos abuelitas de 35 años! Existen anuncios sobre "Termina tu bachillerato en 18 meses" o "Logra un espectacular cuerpo en 3 meses", "Baja de peso sin esfuerzo en tan sólo unas semanas"

Y entonces, confundimos el "Aquí y Ahora" con lo "instantáneo".

¿Por qué esa ansiedad por disfrutar al máximo y ser felices?
¿Por qué el miedo a  que se nos vaya la vida?

¿Sabías que, cuando disfrutas al máximo ni siquiera sabes que lo estás disfrutando al máximo? ¿Sabías que, te das cuenta que has disfrutado al máximo segundos, minutos, horas e incluso días después de haber vivido ese momento? 

¿Sabías que decir "Disfrutar al máximo" implica una comparación con tu pasado?
Así es, "máximo" indica que ha sido "mejor que.." y para ello tuvimos que compararlo (incluso inconscientemente) con otros momentos de nuestra vida. 

¿Por qué nos hacemos esto? ¿Por qué nos estamos obsesionando con este estilo de vida?

Nos enfocamos tanto en Disfrutar de la vida que nos provocamos ansiedad.
Creemos que disfrutar de la vida implica HACER actividades, TENER adquisiciones de valor económico, DEMOSTRAR a los demás que todo esto sí existe.

Y nos olvidamos de SENTIR.

Vemos  nuestros padres o en algunos casos abuelos  y consideramos que mal gastaron su vida en dedicarla al trabajo por años sin "disfrutar" de su dinero. Y entonces decimos "Gasta tu dinero", "No lo dejes para mañana, ¡disfrútalo!" "Viaja, cómprate aquello que tanto deseas" 

... ¿Lo puedes ver? Son recompensas instantáneas.

Asumimos que no gastar nuestro dinero, trabajar arduamente para ahorrar dinero es tiempo y energía perdida. Vemos la vida en términos de "ganancias-pérdidas".
Nos convertimos en una generación materialista.

¿Dónde está nuestro sentir? ¿Por qué depositamos nuestra felicidad y sensación de éxito en lo externo"? ¿Por qué decimos que la felicidad no se compra, pero nos sentimos tristes, derrotados, insatisfechos y agobiados cuando no tenemos aquello para "Disfrutar de la Vida"? ¿Por qué nos parece tan complicado disfrutar de la vida cuando estamos pasando por momentos de escasez, salud en estado crítico o cuando vivimos momentos donde "No tenemos nada"?


¿Por qué creemos que pensar en ahorrar dinero para nuestro futuro no es vivir el "Aquí y Ahora?

Vivir el "Aquí y Ahora" no excluye la planificación de nuestro futuro. Sí, lo sé "No sabemos si mañana vamos a morir" pero tampoco sabemos si vamos a vivir.

Te daré un ejemplo:

- Hoy eres joven, tienes un trabajo con un sueldo que cubre tus necesidades y algo más. Decides disfrutar tu vida porque eres joven. Lo gastas en fiestas, viajes, comprar todo lo que te gusta, comer donde no te preocupes por ver los precios de la carta. No te preocupas por ahorrar porque a final de cuentas si mañana mueres entonces tu esfuerzo por ganar ese dinero no valió la pena.

Pero, ¿y si mañana vives? Y , ¿Si sigues vivo por algunas décadas más?
¿Qué pasará cuando tengas que comprar una casa para vivir con tu nueva familia?, ¿Qué pasará si tú o un familiar atraviesa una enfermedad donde tendrás que cubrir altos costos? ¿Qué pasará si, por más pensamientos positivos que tengas, ocurre algún evento que cambiará tu vida por completo? ¿Qué pasará si llegas a tu vejez? ¿Tendrás tus ahorros?... Tal vez no, porque dedicaste cada día en vivir al máximo y disfrutar de tu presente.

Es cierto que antes las personas dedicaban bastante tiempo al trabajo, creemos que no disfrutaban de su familia y que no tenían tiempo de calidad. Y hoy, algunas personas que viven su vejez podrían decir que fue así, que tanto trabajo no valió la pena. ¿En verdad no disfrutaron? ¿Estamos tan seguros de ello? ¿En qué nos basamos para hacer esta comparación sobre quien sí disfruta y quien no?

Vamos a pensar que hoy puedes tener todo el poder adquisitivo que deseas, que puedes visitar cada rincón del mundo, que puedes probar cada platillo de los mejores lugares. Vamos a pensar que puedes tener el mejor celular, auto, vivienda o la mejor ropa de la temporada. Vamos a pensar que tienes el puesto que deseabas o el trabajo que soñaste. Vamos a pensar que tienes todo y que puedes disfrutarlo todo Ahora.

¿Y luego? ya lo tienes todo, lo puedes disfrutar e incluso tus redes sociales han documentado todo este manjar de felicidad. Y luego.. ¿Qué sigue?


Parece que compramos felicidad y bienestar instantáneos y en cuanto éstos momentos culminan buscamos, ansiosamente, opciones para volver a sentir esa felicidad. Parece que no entendemos que el "Aquí y Ahora" se trata de saber vivir la vida con lo que tenemos Aquí y Ahora.

Porque el Aquí y Ahora no siempre será el mejor escenario de nuestra vida, pero en nosotros, en nuestro interior, incluso sin gastar un sólo centavo, está la decisión de elegir cómo nos sentiremos con lo que estamos viviendo. 

En nosotros está elegir qué decisiones tomar, sean las adecuadas o no.
En nosotros está en ser libres de sentir tristeza, enojo, miedo, alegría, preocupación, etc.
En nosotros está la decisión de qué vamos a hacer con lo que estamos viviendo y en ingeniar nuevos caminos con nuestros recursos personales que en el Aquí y Ahora tenemos.

Así que...
Conoce tu pasado.
Siente tu presente.
Planea tu futuro.

Después de todo ¿Para qué era que queríamos ser grandes?




No hay comentarios.:

Publicar un comentario